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Los «otros mundos» en la literatura fantástica

Desde los mundos opuestos a los nuestros hasta los que son inquietantemente similares pero con una presencia sombría, los universos de fantasía dan a los lectores una emoción y un escape temporal de la realidad. No es fácil crear un universo fantástico, a pesar de lo que muchos puedan pensar; por eso, es importante apreciar aquellos que realmente se han revestido de una especie de realidad alternativa, y nos han hecho creer que, ciertamente, podrían existir en un universo paralelo.

Aquí tienes algunos de los más famosos, seguro que la gran mayoría te suenan de tus sesiones de lectura, pero también del cine y la televisión:

  • Arda y la Tierra MediaArda es el hogar de la Tierra Media y el centro de gran parte del universo de Tolkien. Fue creado artísticamente para dejar lo suficiente a la imaginación. Sus libros citan muchos detalles como la flora, la fauna, criaturas de todo tipo, e incluso se aventuran más allá del planeta para describir los cuerpos y actividades celestes.
  • El Mundo Mágico: Lleno de cosas aparentemente «normales» como búhos, trenes, libros y tiendas, el universo de Harry Potter está lo suficientemente cerca de nuestro propio mundo para que todo lo que se presenta parezca posible, pero con una abundancia de lo sobrenatural y fantástico.
  • El «Universo»: Por si las historias de King no fueran lo suficientemente aterradoras, todos sus libros están conectados. Cada trabajo es independiente, pero muchos se dieron cuenta de que varios personajes malvados hacen apariciones en otros libros. La Torre Oscura es el epicentro del universo de Stephen King y es donde el telón se abre en el multiverso que él creó.
  • El Mundo Conocido: El mundo de GoT es similar al nuestro, con islas, mares, continentes y casquetes de hielo, pero el autor de la serie de libros «Una Canción de Hielo y Fuego» indica que su universo estaba destinado a ser completamente separado y alterno de nuestra realidad. . Es muy diferente en muchos sentidos, incluso en que las estaciones están regidas por la magia, los dragones son reales y ¡existen hombres de dos cabezas!
  • Terabithia: La tierra de Terabithia es un reino imaginario gobernado por amigos que simplemente jugaban en el bosque, ajenos a las tragedias y la crueldad de la vida. Una tierra de imaginación creada por niños y utilizada para su propio escape y para crear un vínculo de amistad.

La fantasía, precursora de mucho en la literatura

La literatura fantástica, junto con la de ciencia-ficción, la romántica y la erótica, se han considerado durante mucho tiempo como un género menor dentro de la novela de ficción. Sólo pasado el tiempo la crítica se fijó en esos escritos que gustaban a millones de fans y que los leían a pesar de ser calificado como lectores de segunda, y entonces se dio cuenta de que a lo mejor estaban perdiendo verdaderas obras de arte por culpa de algunos prejuicios absurdos. Así, resultó que Tolkien, Asimov, Bárbara Cartland y E.L. James, por nombrar algunos, eran unos escritores de primera, y sus hordas de fanáticos se sintieron encantados y alucinados al mismo tiempo.

Y luego empezaron, muchos años después de haberse escrito, con el análisis de esas obras. En lo que respecta a la literatura fantástica, madre mía, ni siquiera podían pensar en lo que se habían perdido. Muchos autores, como el referido Tolkien pero no el único, habían creado verdaderos universos paralelos, creando mundos que se sustentaban a sí mismos retratándolos como si hubieran surgido tal y como el nuestro, y tuvieran una cosmogonía propia. Y para colmo, los temas que se consideraban importantes en la actualidad, resulta que habían sido tratados ya en esas novelas, y además con claridad y sin ningún tipo de tabúes y prejuicios, más allá de lo que podía suponerse de la sociedad de la época. Sin ir más lejos, podemos encontrar dentro del género fantásticos muchos libros lésbicos, donde se retratan las relaciones sexuales entre mujeres sin ningún tapujo: reinas poderosas que mantenían  mancebas bajo sus órdenes para su placer, o señoras de clase alta que acababan enamoradas de sus sirvientas, o compañeras de armas que un día se daban cuenta en medio del fragor de una batalla que se sentían atraídas la una por la otra. Con un poco de estilo machista, quizá porque la gran mayoría de escritores son hombres, se estilaba que hubiera una cierta relación de poder, como si estas protagonistas necesitaran estar una sobre la otra, aunque su relación lésbica las hacía estar a la par al final del día; pero también verás expertas en magias que mantenían relaciones de igual a igual con una colega, o simplemente campesinas que vivían juntas como pareja, sin que necesitaran la aparición de ningún hombre.

Sin embargo, no te equivoques y elijas leer una novela fantástica esperando una escena de lesbianas porno. No es así como funciona, ni en los escritores clásicos, ni en los actuales… al menos todavía. Yo no las he encontrado, quizá existan por supuesto y no he dado con ellas, pero está claro que no hay que confundirse de género: si quieres tema entre dos tías, pues nada, vete a la literatura erótica homosexual. Lo que intento explicar aquí es que, a pesar que muchos de los creadores de literatura fantástica comenzaron sus andaduras a principios del siglo XX, no tenían miedo de introducir en sus historias personajes homosexuales, ni siquiera a tortilleras, que han sido peor tratadas por la sociedad que los hombres, si cabe. Hoy en día preferimos ver videos porno gay puesto que es fácil acceder a este tipo de contenido. Y si se me permite otra opinión personal, lo hicieron estupendamente bien, ni aspavientos ni querer llamar la atención, sólo dando a este tipo de relación un sentido lógico, como lo hicieron con cualquier otra pareja heterosexual, de forma natural.

Y si hablamos de la tendencia de la literatura fantástica actual, ¿qué podemos decir? Fácilmente se ven relaciones homosexuales ya sean de gays o lesbianas, se habla de transformismo y de transexualidad, se toca el tema del sexo familiar y hasta del incesto consciente… En fin, que para haberse tratado como un material de segunda clase durante mucho tiempo, diría que el género fantástico ha roto bastantes barreras, y las sigue rompiendo.

 

Donde se confunde fantasía y realidad…

La verdad, a veces los entendidos en literatura se vuelven un poco… ¿cómo lo diría?… «exquisitos» sería una buena palabra, aunque no la única. Lo que quiero decir es que tienden a ser demasiado cuadriculados, a querer encorsetar obras y estilos literarios sin ninguna razón lógica; y eso hace que a veces el público que, no está tan puesto como ellos en estas cuestiones técnicas, se confunda un poco o simplemente se aburra, y se vaya a otra cosa, mariposa. Así que ojo, expertos literarios, vuestras opiniones y tecnicismos pueden hacer que se pierdan un montón de potenciales lectores, ahí queda eso.

¿Por qué digo esto? Bueno, porque, en lo que se refiere a la literatura fantástica, como ya he comentado antes, habría que analizar lo que significa eso de «fantástica». Se da por entendido que se refiere a mundos, seres o situaciones que no son reales; pero, en realidad, casi se podría aplicar a cualquier obra de ficción escrita. O al menos, esa es mi opinión, que cada día tengo más arraigada. Por ejemplo, en este género, ¿no podría entrar también la literatura erótica?

Para los que no son aficionados a ese tipo de lectura, y puedan entender mi razonamiento, haré una analogía en plan visual, y les hablaré del cine porno (ya sean películas o videos xxx online). Espero que todos aquellos que sí que son fanáticos de este género artístico (son muchos, no lo neguemos, ni tampoco neguemos que es un tipo de arte, aunque a veces se devalúe bastante, jeje) se hayan percatado de que en esas escenas hot hay mucho de fantasía, y que no todo corresponde a la realidad de lo que sucede en las relaciones sexuales de cada día. Precisamente, la pornografía juega con nuestra fantasía como pocas otras cosas, haciendo que nuestra mente asimile no sólo lo que nos entra por la visión, sino evocando y relacionando otros estímulos con ello, hasta llegar a provocarnos excitación; pero también está claro que está llena de estereotipos que, aunque en su gran mayoría siguen funcionando, no se corresponden con la realidad de cualquiera de nosotros, creándonos mitos o ilusiones que alteran nuestra líbido, pero no nuestro día a día (una auténtica pena, jeje).

De cualquier forma, ya hay muchos artistas del género pornográfico que critican la forma en que el cine xxx sigue tratándonos en pleno siglo XXI, argumentando que necesita una regeneración que se ajuste a los nuevos tiempo; entre ellos Erika Lust, una directora afincada en Barcelona que tiene muy claro que su cine porno no tratará a la mujer como el simple objeto de deseo y satisfacción del hombre, sino que esto debe ser mutuo y en ambas direcciones. Seguro que con el tiempo habrá algún tipo de cambio en este sentido o en otros muchos, todo será si el público en realidad quiere que lo haga.

Y bien, ¿se podría aplicar todo esto a la literatura erótica también? Así mismo, en ella se juega con muchos estereotipos, incluso más que en las películas, porque aquí sí que es la mente la que trabaja para evocar lo que dicen las palabras; además, existe mucha más subjetividad, porque cada persona que las lee es un mundo, y le pueden resultar muy diferentes de cualquier otro lector. Y por supuesto, se narran situaciones que muy pocas veces se corresponden con la realidad, así que desde luego todo depende de la imaginación del autor y del que lee la obra, y en pocas ocasiones se corresponden con vivencias propias. Se podría analizar esto profundamente, pero, como veis, hasta este punto puede servir para corroborar mi opinión: es inútil querer encorsetar los géneros literarios, ¿o no?

¿Conoces «La Historia de Kullervo»?

Creo que todos los visitantes de este blog conocerán al J.R.R. Tolkien como uno de los máximos representantes de la literatura fantástica; de hecho, gracias al éxito mundial de su épica El Señor de los Anillos, no hay quién dude que es toda una leyenda literaria. Pero si alguna vez te ha interesado saber cómo comenzó Tolkien a convertirse en uno de los más brillantes iconos de las letras, entonces La Historia de Kullervo puede darte algunas respuestas. El primer borrador inédito de esta obra se lanzó hace justo ahora 2 años, en agosto de 2016, con las notas originales de Tolkien.

Según parece, durante 1914, mientras Tolkien estudiaba poesía en la universidad, esta historia fue su primer intento significativo de escribir fantasía. El amor de Tolkien por el folklore y la poesía finlandesa lo llevó a escribir este libro que nunca se terminó, pero que dio como resultado directo la escritura de El Hobbit y El Señor de los Anillos. La historia es una versión en prosa del Ciclo Kullervo: una sección de la epopeya finlandesa del siglo XIX, el Kalevala; también influyó en El Silmarillion, otra gran novela fantástica del autor, siendo una de las fuentes para contar la crónicas de Túrin Turambar, uno de sus personajes emblemáticos. Tanto Kullervo como Túrin son intimidados injustamente hasta que buscan vengarse sangrientamente de sus torturadores, mientras que seducen sin saberlo a su propia hermana, antes de acabar suicidándose.

Aunque el manuscrito de esta novela se puso a disposición del público para su lectura hace muchos años, nunca había sido publicado como un libro independiente. Por eso, la edición de 2016 era esperada por muchos amantes del género, que conocían el manuscrito y la historia pero que nunca habían podido disfrutar de tener una copia entre sus manos.  Ahora, ese deseo se ha hecho realidad, así que sólo queda hacerte con uno de estos ejemplares, y disfrutar con los primeros pinitos de Tolkien en el género que lo convirtió en leyenda.

Los dragones más famosos de la historia

Hay algo mágico en los dragones que ha capturado y llenado la imaginación de las personas durante miles de años, desde que aparecieron en las historias escritas en la antigüedad. Los dragones son criaturas míticas que aparecen en diferentes culturas y períodos de tiempo. Han sido descritos como monstruos, serpientes, reptiles o bestias, y por lo general se piensa que tienen alas y respiran fuego. También se dice que tienen escamas y garras, mientras que algunos también tienen cuernos. Algunos pueden tener más de una cabeza, y casi siempre son venenosas; también pueden tener más de una cola, y pueden tener dos, cuatro o más patas.

Durante gran parte de la historia, los dragones fueron considerados como cualquier otro animal exótico: a veces útil y protector, a veces dañino y peligroso. Eso cambió cuando el cristianismo se extendió por todo el mundo, y los dragones adquirieron un matiz decididamente siniestro y llegaron a representar a Satanás; sin embargo, estas fascinantes criaturas mágicas han continuado cautivando nuestra imaginación a través del folklore, la literatura y, más recientemente, películas, series de televisión y videojuegos.

¿Quieres conocer a algunos de los más famosos? Aquí va esa muestra:

  • Maléfica: Sí, la villana de La Bella Durmiente, creada por Disney en 1959, es una de las pocas dragones hembra que conocemos. Ella tiene una forma humana la mayor parte del tiempo, pero una vez que se enoja puede convertirse en un dragón feroz, escupiendo fuego que hace que sus enemigos corran por sus vidas.
  • Horntail el Húngaro: Horntail es un dragón nativo de Hungría y se considera la raza de dragón más peligrosa que existe. Lo conocimos en la versión cinematográfica de Harry Potter y el Cáliz de Fuego, donde se liberó de su cadena y atacó a Harry; los dos lucharon en una emocionante persecución que se extendió por todo el recinto del castillo, y que estuvo a punto de causar la muerte de Harry.
  • Wyvern: El wyvern es una criatura legendaria con la cabeza y las alas de un dragón, un cuerpo de reptil, dos patas y una cola. Es particularmente popular en la literatura británica y a menudo se asocia con el clima frío y el hielo.
  • Charizard: Charizard es un Pokemon bípedo y draconiano y es seguramente el más valioso de todos ellos. Charizard era casi imparable en el juego de cartas de la serie, y si eres uno de sus fanáticos, entonces seguro que sabrás que cada vez que hacía su aparición en el mazo, había drama y lágrimas.
  • Bub y Bob: No hay duda de que Bub y Bob son los dragones de videojuegos más famosos de la historia. Y para los que piensen que Bubble Bobble es una imitación de Donkey Kong, sólo hay que fijarse  en el cambio de personajes y de objetivo: son dragones que tienen que esquivar monstruos, no fontaneros que esquivan barriles.
  • Drogon: El personaje de Game of Thrones es uno de los dragones nacidos en el mar de Dothraki, junto con Viserion y Rhaegal. Lleva el nombre del fallecido esposo de Daenerys, Khal Drogo, y se distingue por sus escamas negras y rojas y sus alas rojo oscuro.

Son sólo unos cuantos, pero está claro que los dragones representan una de las criaturas preferidas por todos los aficionados a la literatura fantástica.

Nuevos mundos, nuevos futuros…

Si tuviéramos que definir lo que en realidad significa el término «fantástico» en lo que respecta a la literatura, créeme que no sería nada fácil. En primer lugar, deberíamos considerar que cualquier relato que fuera de ficción, realmente se podría meter en esta clasificación, ya que, obviamente, tendría elementos de fantasía; pero como claramente esto no sería un elemento diferenciador, y englobaría un montón de géneros que sería imposible diferenciar  según este criterio, generalmente se emplea este término para todo aquello que tenga tintes de «extraordinario» o «poco corriente», yéndonos a otra acepción de la palabra fantástico (como ves, ya no tiene que ver mucho con la fantasía). Si es acertado o no, poco importa, ya que el imaginario común ha convertido a este tipo de literatura en el referente de todo aquello que tiene brochazos de sobrenatural, extraño, terrorífico o ciencia-ficción.

Como ves, si se te ocurre decir que eres aficionado a este tipo de lectura, entrarás en un grupo con un ancho margen de movilidad, y tendrás que ser más concreto si en realidad quieres referirte a un subgénero en particular dentro de esta literatura. Hay que decir que estos subgéneros han venido muy determinados por las épocas, convirtiéndose así en algo así como una moda, propia de unos años en concreto; así, fueron famosas en la antigüedad las fábulas y las epopeyas protagonizadas por héroes y seres fantásticos; en el siglo XVIII se desarrollaron los cuentos infantiles; en el siglo XIX irrumpió con fuerza la literatura gótica y de terror, y en el siglo XX la ciencia-ficción ganó un montón de adeptos.

¿Y qué es lo que se lleva ahora en cuestión de literatura fantástica? Bueno, la tendencia es claramente hacia un público joven, y en vez de ayudarse con seres sobrenaturales o mundos de fantasía, se han puesto de moda los futuros distópicos. ¿En qué consiste esto? Bueno, se trataría de narrar un mundo generalmente post-apocalítico, que ha sobrevivido a alguna clase de desastre natural o pandemia causada por el hombre, y en la que se intenta sobrevivir a nuevas circunstancias creando un nuevo orden social, que generalmente es muy útil para unos pocos y oprime a la gran mayoría; en fin, que casi volvemos al feudalismo o a una autocracia aunque con condiciones de vida diferentes, pero la cosa se resuelve casi siempre echando manos de los antiguos valores, vamos, los que tenemos en este mundo imperfecto pero que al parecer son los que hacen una sociedad mejor. La verdad, si esto es en todo lo que podemos pensar, y es lo que más gusta a nuestros jóvenes, no sólo la literatura está yendo por lugares extraños, sino también todos nosotros en general.